Las horas perdidas

Las horas perdidas
Pérfidas druidas
Añorando los detrozos
De los ajenos gozos
Que jamás tendrán
Pero siempre podrán arruinar
Esclavos nos hacen al acumularse
Nos asfixian, nos rompen, nos matan
De ellas nadie puede salvarse
Simplemente retrasarlas hasta que te alcanzan
Y después, nada quedará
Cobrarán tu deuda, y a un nuevo ser atormentarán
¿Cómo es que olvidamos, lo más simple de la vida?
¿Cómo reemplazamos el agua por el vino?
Nos perdemos y nos enamoramos de la fantasmal ira
No vivimos, pretendemos, y nos creen
Que mágico teorema encontramos en la actuación
Adoración, devoción, sinónimos sutiles de obsesión
Llámame insensible, sé que te equivocas
Tengo todos y cada uno de los sentimientos que tú evocas
Pero yo los actúo, los mejoro
A una sola cosa adoro
Las demás, puedo pretender amar
Ahora sabes que tan bien puedo actuar
Fingir, admitir el engaño
Decirte en silencio que te amo
Cuando es a ella a quien admiro
Ella es mi agua y es mi vino
Qué ironía, enamórate de mi avaricia
Para después ser quien te envicia
Y nunca despertar de aquel sueño fatal
Un conversación más entablar
Olvídame, y ven a mi cuando me necesites
Eso es lo que ayer y anteayer hiciste
Así que hazlo una vez más, qué importa
Una última vez, si es necesario, después explota
Regresa a ellos, cuéntales de mi
Niégales todo lo que te di
Para que puedas presumir que al final te rechazé
Aunque no lo entendiste, yo sé que te lastimé
En el orgullo o en el intelecto
En la pasión o en el momento
Da igual, si al cabo vas a regresar
A este círculo eterno que nadie admite está mal
Pero tiene sentido...
Todo a mi alrededor está vivo...
En llamas o ahogado, agonizante trazo
Pero vivo al fin, aunque sea por un lapso
Y esa vida efímera que se esfuma
Se convertirá en una tóxica espuma
Con tu forma pero sin tu nombre
Un ser antropomórfico que no es un hombre
Un hada o un hechizo, una poción o un guiso
Que me mantendrá vivo por un rato
Hasta que implore verte otro tanto
Porque al final, admitiré que siempre supe
Que frente a mi nunca te tuve
Hasta que te fuiste sin decir una palabra
Hasta que tu mirada dejó de estar difrazada
Sin ti, todo el sueño perdí
Casas derrumbadas, caóticas y acomodadas
Muñecas rotas y deshilachadas
Tiene tanto sentido como la vida sin ti
Como el amor sin sentir y la muerte sin vivir
Y al final, no sé si en verdad desperté
O un sueño dentro de otro sueño soñé
Si a Poe o a Lovecraft cité
Lo único que sé, es que sin ti me encontré
Y la vida sin ti, yo repulsé...
¿Pero qué sueña Lovecraft, si no es con sus mitos?
Y Poe con sus miedos infinitos
Así mismo, no sé ya si te creé o te soñé
Si me enamoré o solamente mi idea añoré
Si al Cthulhu o al Cuervo te asemejé
Sólo sé, que en todas maneras te representé
Y ahora, perdido, buscando un nuevo enfoque
Me encuentro redundante en el mismo entronque
Sigo esperándote cada noche
Sabiendo que no vendrás, ni siquiera me recordarás
Con tu presencia no me honrarás
Me ahogarás en tu ausencia, una vez más...
Se me acaban los puntos y las comas
Pero letras y palabras, cariño, me sobran
Sólo que ya no tienen sentido
Escribir es ahora sólo un vicio
Mis amantes las palabras y el pesar
Es la única manera de poderlas besar
Mientras espero a alguien real
Ese alguien eres tú, y nunca llegarás
Así que ya no tengo nada que decirte
Pero miles de libros que escribirte
Porque mil palabras valen más que mil imágenes
Siempre que se las dedique al centro de la vorágine
Desastre natural, el solo verte caminar
Dios se equivocó al tal belleza crear
Y que no pueda ser de nadie, condenada a vagar
Hasta que los poetas sangren sus lenguas por ella cantar
Los diccionarios y enciclopedias me tendré que acabar
Para un nuevo verso poderte dedicar...
Ni siquiera lo leerás, pero algún día entenderás
Que eres la razón de todo bien y todo mal
La razón por la que esta alma por ti se quiere acabar
La persona que necesito para el mundo poder abandonar...
La génesis inconfundible de mi desviación mental